La Falta de Responsabilidad

Reflexiones que Transforman #10

La mayoría de las personas realmente no desea crecer y en última instancia evolucionar. Ya que esto requiere o que uno deje de estar alimentando el estado actual de vida para aventurarse a uno totalmente nuevo y distinto al actual. Tomar las riendas de uno y de su propia vida requiere un cambio de mentalidad monumental.

Ahí donde el corazón y la mente viven en unidad y se enfocan hacia una meta que solamente puede llevar a la Grandeza y no a la esclavitud.

Muchos solamente desean que su mundo interno sea resuelto, tranquilizado y/o que sus deseos sean cumplidos sí o sí. Por lo que no toman responsabilidad de ellos mismos ni de la forma en que viven y crean su vida.

Al no estar consciente de ellos y de sus hábitos, sus patrones y condicionamientos mentales-emocionales, estos les rigen y se encuentran presentes solamente para pedir o reclamar a los demás o a la vida misma a que se cumplan con sus demandas, sus expectativas acerca de lo que la persona tiene para su vida y para sí misma.

Puedes darte cuenta como ese alguien responsabiliza al mundo externo de cómo se siente y eso es algo muy limitado de vivir.

Uno constantemente está dependiendo, controlando, necesitando, tratando de ser diferente, tratando de ser mejor persona, tratando de componerte, tratando de arreglarte, tratando, tratando, tratando, y ¿qué pasa?, que todo este tratar se refleja en tu vida y en tu relación con los demás.

Obviamente ésta manera de vivir no trae muchos beneficios porque hay un estrés constante que indica que existe una idea de carencia, “de que uno no es suficiente”; uno no puede actuar o no puede ser como uno sea, no se puede expresar como uno es porque se pierde el reconocimiento y la aceptación de los demás.

Esto que les comento es algo que pasó conmigo. Había una parte de mí que decía: “oye, hay algo que no está muy bien en mí, hay algo que no embona, hay algo que no está ayudando, no soy suficiente, los demás deberían de amarme o darme lo que necesito, la vida me tiene que recompensar por todo lo que no me ha dado y quitado”, lo cual ocasionó que yo responsabilizará a mis amistades de lo que estaba sucediendo a nivel interno y tenía un conflicto muy fuerte entre mis deseos y la vida que no me los cumplía o manifestaba.

Con los años tuve otro tipo de experiencias que me hicieron o me empujaron a que tomara responsabilidad de mí mismo, que me diera cuenta de que la manera en cómo yo me siento, la manera en cómo yo me quiero sentir y cómo yo quisiera vivir la vida es algo que yo tengo que poner atención.

Antes constantemente miraba y culpaba a los demás y al mundo por el estado emocional-mental-existencial en el que me encontraba y esto ocasionó más y más conflicto porque parece que a la vida no le importaba lo que yo sentía.

En mi mente había mucho diálogo acerca de qué es lo que yo tengo que sanar, que tengo que trabajar y qué es eso que no veo que está afectando la manera en al que vivo mi vida.

Al ver esto en mí, vi que todo esto es muy común y es algo que le sucede a todos y no nos damos cuenta.

De eso se trata esta invitación, de ir a lo más profundo de nosotros y descubrir nuestro verdadero Ser, eso que no está condicionado ni tiene límites de ningún tipo. Una aventura en la que hay que descifrar todas esas cosas internas, ese laberinto interno, ese rompecabezas de la vida de uno mismo, de las circunstancias, de la psicología humana, de cómo uno piensa, de cómo uno siente, porqué actuamos, porqué somos como somos, etc.

Para que nos demos cuenta de que cada persona tal cual es, es perfecta, en su manera de pensar, en su manera de ser, su manera de expresarse pero en el ser humano, en la mente humana no hay una total aceptación, no hay un amor constante de cómo podemos reconocernos tal cual somos sin importar que, ¿porqué?, porque desconocemos quiénes somos, desconocemos nuestro ser, por eso descubriendo al Ser descubriremos quienes somos o si descubrimos quienes somos descubriremos al Ser.

La mayoría de nosotros llegamos a este mundo y fuimos aprendiendo mientras íbamos caminando y experimentando al estar expuestos a la sociedad, a la manera de interactuar con otros, a las leyes, es decir, fuimos aprendiendo como es este juego, así es como empezamos todos, aprendiendo.

Entonces, dependiendo donde hayas nacido, ya sea en circunstancias de familia, de sociedades, de nivel socioeconómico, vas a aprender diferentes cosas, vas a empezar a valorar diferentes cosas, y eso es algo muy importante de poner atención porque tienes que reconocer que todo lo que te compone o todo lo que crees ser ha sido una acumulación de aprendizajes.

Dichos aprendizajes es la acumulación de experiencias, de consejos, mensajes en la radio, de la televisión, que todo el tiempo nos están diciendo o nos están mostrando qué es la vida, cómo es la vida, qué es lo bueno, qué es lo malo, qué es lo aceptable, qué no es aceptable.

Y ¿qué pasa?, que en la psicología humana, en la mente, en la psique y en la manera de percibir, vamos acumulando creencias, aprendizajes, aprendemos idiomas, aprendemos formas sociales, como le hablamos al adulto, como le hablamos al niño, como le hablamos a las personas que están realizadas en la sociedad; señores, señoras, doctores, abogados, etc. Todo esto, lo vamos a prendiendo de una manera bastante vivencial, de una manera interactiva, a través de todos nuestros sentidos, de la vista, del tacto, a través del intelecto.

Y a qué voy con esto, que en medio de tantas cosas que aprendemos, estamos tratando de ir conociéndonos. Por ejemplo, crecemos con una familia y empezamos a aprender las cualidades de la familia, tenemos ciertas cualidades, ciertos talentos y herramientas; vamos aprendiendo muchas cosas a nivel mental y emocional, que a largo plazo impactan tanto positiva como negativamente la manera en cómo experimentamos el mundo.

Y eso es algo muy importante, porque significa que dependiendo de las cosas que hayamos aprendido, como las hayamos aprendido, o dependiendo de cómo hayamos interpretado las experiencias de vida tendremos un impacto en la forma en la que vemos a vida.

Pero si pones mucha atención a todo esto, hay algo que se nos escapa a no ser que se toque el tema, y el verdadero asunto es el siguiente: si todo fue aprendido y hemos creado una sociedad a base de los aprendizajes de los demás para definir quienes somos, entonces, ¿quién en verdad somos?

Si has crecido creyendo que eres los pensamientos, el nombre, la nacionalidad, tus logros, tu sociedad, etc.. debajo de todo esto, antes de aprender todo esto tú eras, tú no estabas contaminado por nada.

Y si no me crees, pregúntate, ¿quién eras de bebé, o qué o quién estaba ahí antes de que el sentido del “yo” empezara a colarse en tu mente?

Estas preguntas son clave, ya que la respuestas te revelarán un mundo totalmente opuesto al que conoces actualmente.

Aquí está un paso a que descubras tu poder divino y dejes de responsabilizar al afuera por el poder de creación que tienes y que conscientemente estás jugando.

__________________

Reconecta con la grandeza de tu verdadero Ser.

Conoce el poder que siempre has tenido sobre las decisiones, acciones y resultados de tu vida.

Descúbrete a ti mismo. ¡Ya es hora!

Visítanos en:

elrugirdeldespertar.com  / facebook.com/elrugirdeldespertar

Saludos, te amo y te mando un fuerte abrazo.

Sarkhan

* Nota: te agradecería que compartieras el contenido con otras personas que crees le pueden ayudar o interesar. Te recomiendo que participes activamente en la sección de “Comentarios y Participación” que encontrarás más abajo. Ahí podrás hacer preguntas, compartir experiencias y puntos de vista que nos hacen crecer a todos. También hay la opción de suscribirte a los comentarios para seguir el hilo de la conversación. De igual forma, visita nuestras Redes Sociales para ver más contenido.